miércoles, 29 de junio de 2016

Partida de Frostgrave

¡Este domingo ha sido un domingo de Frostgrave!

Hace poco os presentaba mi banda de Frostgrave. La banda ha sufrido cambios a nivel de juego y de apariencia. A nivel de miniaturas, he sustituido la vieja mini de Gandalf por un mago de Grenadier (más viejo aún) y a Galadriel por el mago del Hero Quest (el nuevo aprendiz se llamará Anaximandro). Respecto a la campaña: he fichado a dos ballesteros enanos porque tenía las miniaturas, me he apropiado a una Biblioteca que me da la oportunidad de encontrar pergaminos y grimorios entre partidas, y he conseguido un par de armas mágicas tras la última partida.

En esta ocasión, la banda de mi Taumaturgo se ha enfrentado a las fuerzas de Leisynn el Nigromante.

La banda de Teofrastus y Anaximandro:


Leisynn el Malvado, su aprendiz Walpurgis y su banda de horrores nocturnos (el hombre lobo es un bárbaro): 


Las bandas se enfrentaban en una zona de la ciudad donde había varias columnas - estatuas con la forma de algún dios innominado:


La zona de la batalla:


 Leisynny sus secuaces se acercan a una de las columnas buscando algo de valor cuando ¡ésta les ataca! Destruyen la columna mágica sin dificultad y encuentran un tesoro:


Los hombres de Teofrastus, con ayuda de Anaximandro, destruyen otra de las viles estatuas mágicas:


Teofrastus, que no es tonto, decide ponerse a cubierto y confiar en la artillería enana mientras invoca unWizard´s Eye para dominar el campo de batalla con su magia sin exponerse personalmente. El ojo de mago es un hechizo muy útil, ya que permite trazar una línea de visión desde el ojo como si el mago estuviese allí. Teofrastus elige colocar el ojo en lo alto de una torre, dominando la mitad de la mesa sin problema: 


Los dos ballesteros enanos tienen una gran actuación, sobre todo al principio de la batalla. Consiguieron herir gravemente al bárbaro no-muerto y no recibieron ningún daño. Por su parte, Anaximandro toma la estatua y ordena a sus hombres avanzar. Boris prepara su alabarda... 


¡Anaximandro desata el poder del Elementalismo! Sacrificando algo de su propia salud, consigue lanzar un Elemental Ball que siembra la destrucción en las filas de los no-muertos. El bárbaro- hombre lobo y un infante esqueleto son masacrados por la deflagración:


Leisynn invoca un hechizo tras otro. Muy pronto masacra a un arquero de Teofrastus (armado con un arco +1) con el infame Bone Dart. Tras la demostración pirotécnica de Anaximandro,  intenta vengarse lanzando Strike Dead sobre Boris. Se trata de un hechizo letal que bien puede matar automáticamente al guerrero, si este falla una tirada... pero afortunadamente la supera, para alivio mío:


Anaximandro invoca el poder de la luz y logra cegar a Walpurgis, el aprendiz de Leisyn. ¡Realmente, este chico tiene madera de mago! Mientras tanto, dos matones cargan contra un solitario guerrero esquelético... intentando acabar con él antes de recibir la carga de otros dos no-muertos que se acercan por el fondo:


Boris se lleva unas gemas con su habitual parsimonia:


Teofrastus es más sutil que su aprendiz. A través del Ojo de mago, utiliza el hechizo de Ilusionista Brillo sobre Leisynn el Malvado. El nigromante se ve rodeado de una luz brillante que revela su posición a los ballesteros como si fuese un faro en mitad de la penunbra. Por supuesto, los enanos aprovechan su oportunidad y abaten al hechicero con sus virotes. ¡Hurra!


La lucha en el centro acaba mal: Anaximandro ve como sus hombres son derrotados, y él mismo cae a manos de los esfuerzos combinados de Walpurgis (ya sin sufrir de ceguera) y un infantryman esquelético. Hay quien dice que la decisión de Teofrastus de invocar un Elemental Ball que acabó por igual con amigos y enemigos tuvo algo que ver con este desenlace...


La partida terminó al sexto turno, sin un vencedor claro. Leisynn se llevó tres tesoros y Teofrastus, dos. Leisynn consiguió un montón de monedas de oro y además encontró un valioso grimorio que no dudó en estudiar. Gracias a sus largas horas de estudio, ha aprendido el hechizo Invocar Demonio, que será sin duda muy divertido :) Aparte de un par de bajas poco importantes, la banda del nigromante salió fortalecida del encuentro.

Teofrastus y sus hombres tampoco sufrieron pérdidas de importancia. Los heridos se recuperaron (menos el pobre arquero, que no participará en la próxima), se ganó oro y se consiguió experiencia. Mi taumaturgo ya cavila qué habilidades será mejor aprender para sobrevivir a las duras calles de Felstad...

Teofrastus y Boris indagan en la biblioteca, mientras un enano se mama tras ellos


2 comentarios:

  1. Grandísimo reporte-informe!

    Por cierto, de donde has sacado el Cthulhu ese? xD

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    Respuestas
    1. Cierto, no lo mencioné. Son estatuas del juego de cartas de La Llamada de Cthulhu de Edge Entertainment.

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